viernes, 16 de enero de 2009

Quizá eso era...


Tu parafernalia ineficiente es descarada y pretensiosa

Empotrada en el altillo donde se enreda cómoda y austera

Desgraciando a los azores rutilantes sobre la grama

Entregada a las runas ancianas y contritas

Que elegantes tejes con la piel de mis manos

Mientras desnudas mi espina calcárea con la lengua

Dejándome adosado a la tierra que sacudiste de tu vestido

¿Qué te digo ahora que antes no dijera?

~o~

Me adentro en la obsoleta marea de una resaca bohemia

Donde no es dable distinguir entre dos silencios

Enfrentados cada cual con nuestras gargantas

Y sepultados al borde de un ya no quiero

Que se rehúsa a desmembrarse entre lo acuoso

De una roca sangrante en el giro de una rueda

Genuflexo ante el cruce de la nada y la vida eterna

¿Qué te digo ahora que antes no dijera?

~o~

Largo a zancadas temerarias sobre los piélagos nublados

Apartando el cáliz agrio que inquiere mi temple

Famélico a fuerza de fuerzas sobreactuadas

Traicioneras imprudentes de anhelos furtivos

No vuelvo por donde vine cuando la ruta no bastaba

Si lo oscuro de mis ojos se ve exangüe de quimeras

Que ya no persigo atento ni despierto a luz de madrugada

Dime, ¿Qué te digo ahora que antes no dijera?

~o~

…Callado…

Quizá eso era...


Seymour Diera




Me saldré totalmente del tono del presente blog una vez más, al final es mío y puedo hacer lo que me de la gana ¿No? Y es que acabo de ver en un canal de cable un episodio de la serie animada "Futurama" (creada por el mismo genio que nos regaló a Los Simpsons), en el cual Fry (el protagonista) encuentra a su perro fosilizado después de mil años. En su emoción decide clonarlo para poder estar de nuevo junto a él, pero cuando hacen el análisis de su ADN descubren que murió a los 15 años (toda una vida para un perro). En vista de eso Fry supone que su mascota de antaño (a la cual dejó de ver cuando cayó congelado criogénicamente el año 2000) ya no lo recordaba pues tenía apenas 3 años cuando Fry desapareció. Por ello y asumiendo que su perrito Seymour tuvo una buena y larga vida canina, decide no clonarlo, ya que piensa que lo olvidó, pero al final se muestra que su perrito nunca dejó de esperarlo, fielmente sentado a las afueras de la pizzería "Panucci's", donde Fry trabajaba y alimentaba al pequeño Seymour.
Los que me conocen saben mi extremo amor por los animales, especialmente por los caninos, y pues el final de este capítulo me encantó, me conmovió y alguna humedad indiscreta me asaltó mientras lo veía. Es por eso que entré para poner esto sencillamente porque me provocó, además que me gustaría compartir la parte final de este episodio con ustedes.
Ahí de fondo la canción de Conney Francis, "I will wait for you", realmente preciosa.
Ojalá les guste, y si no...bueno al menos logré que lo vieran muajajaja...

Por cierto, para los que no dominen el idioma anglosajón, Fry (el pelirrojo) dice:

- Yo nunca lo olvidaré...pero él me olvidó hace mucho, mucho tiempo...

Aquí comienza la canción...(Debajo del video podrán encontrar la letra completa)




If it takes forever I will wait for you
For a thousand summers I will wait for you
Till you're back beside me, till I'm holding you
Till I hear you sigh here in my arms

Anywhere you wander, anywhere you go
Every day remember how I love you so
In your heart believe what in my heart I know
That forevermore I'll wait for you

The clock will tick away the hours one by one
Then the time will come when all the waiting's done
The time when you return and find me here and run
Straight to my waiting arms

If it takes forever I will wait for you
For a thousand summers I will wait for you
Till you're here beside me, till I'm touching you
And forevermore sharing your love